Bueno, pues al parecer los pimpollos de la Gestalt tambien tuvieron sus flirteos con el lado oscuro de la para-ciencia. Si esos peñazos que eran Rubin, Koffka, Wertheimer y Köhler aburrían al personal con sus cochambrosos experimentos perceptivos, el díscolo Wolfgang Metzger se saltaba a la torera la metodología hobbesiana de sus colegas, apostando por una hipótesis bastante bizarra: la existencia de un Ganzfeld o "campo homogéneo" de la percepción. Es decir, el menda creía que no poseemos la vista, el oído o el olfato como sentidos independientes, sino que eran la frecuencia más baja de nuestras capacidades perceptivas, que tendrían lugar de un modo más "holístico" en el que cabía la percepción ultrasensorial. Y para provarlo, se puso manos la obra con ...¡el Experimento Ganzfeld! Puede que Metzger no fuese el inventor de esta teoría, pero al pertenecer a un club tan respetado como la secta Gestalt, sus especulaciones han tenido más eco que el de otros "investigadores" tipo Jiménez del Oso.
El experimento Ganzfeld viene a ser como sigue: se le tapan los ojos a un fulano (según la wikipedia...¡con pelotas de pin pon! ¿!?) y se le colocan auriculares atronando con ruido blanco (supongo que un disco de Pan Sonic tambien serviría) en un entorno de aislamiento y misticismo; simultáneamente, un notas va soltando una serie de palabras, y si el experimento funciona... el de los ojos tapados es capaz de adivinar, por percepción extrasensorial, aquello que se le está diciendo. Por supuesto, el tema tiene truco: el interfecto nunca dice lo correcto a la primera, sino que suele hacerlo de refilón y después de varios intentos, hasta el punto de que cabe especular con que se trate de "casualidad".
Obvio decir que pese a que estadísticamente el experimento Ganzfeld suele tener un alto índice de aciertos, son pocos los científicos que dan credibilidad a dicho método. Lo cual es realmente triste, porque si para algo deberían existir los científicos es para demostrar de una puñetera vez que se puede leer la mente, mover objetos, acertar la quiniela y hacernos invisibles. ¿¿Cómo es posible que sean capaces de mandar cohetes a Marte, y sin embargo no dan pie con bola a la hora de investigar la parapsicología?? Triste. Estaría muy bien que por fín se diesen pasos en esa dirección, pero parece que están más interesados en la antimateria y las ovejas clonadas. La verdad es que tal y como está la vida, el experimento científico al que me prestaría más gustoso en estos momentos, es el de la "enseñanza a lo Matrix": ya sabéis, te meten los datos en la cabeza a través de un enchufe, y te ahorras horas y horas de teoría y práctica. Eso supondría el fín, por ejemplo, de esas infernales Escuelas de Arquitectura.
Mola cuando te pones paranormal.
ResponderEliminarchaVal, que te leo la mente desde akí!!!! desde luego, siempre estáisn pensando en lo mismo X-D
ResponderEliminarYa tío, mejor ponerme paranormal que ponerme subnormal. hace tiempo que no veo a iker, echo de menos esos temas, kizás en este tiempo ya hayan encontrao marcianos, zombies o brujas. me tengo que actualizar
... un currante estimulante (lo digo por observer).
ResponderEliminar... estos visionarios megalómanos (con complejos varios de inferioridad)... son los que hacen que la "ciencia" tenga sentido... es el camuflaje perfecto para la "ciencia"... siempre objetiva y aséptica... en comparación con los sacadineros descarados con ínfulas aristocráticas de los que la "ciencia" se ríe... no por su fracaso (son la avanzadilla de la ciencia)... sino por su descaro.
... y es que... como dijo Sócrates: los valientes mueren jóvenes... en provecho de los cobardes (le faltó decir)... claro que Sócrates nunca defendió la valentía... y murió anciano (aunque valientemente)... ¡qué jodio seductor trabalingüístico!
Habelas hailas.
ResponderEliminarMe has inducido a tragarme un documental en el Yo tube a 5 partes:
Espías psíquicos, se llama.
Ayer me quedé sobao con Iker...Me pasa mucho últimamente.
Bueno me voy para cama que mañana las locas de Ares acaban conmigo.
Más que el final de las infernales escuelas de arquitectura, yo me alegraría de que fuera el fin de esas infernales oposiciones.
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